En este nivel los niños poseen una madurez neurológica y social, que les permite sostener diálogos más entiquecidos, y así vez habilidades sociales más cimentadas en el compartir, en contar historias y experiencias que han vivido.

A nivel cognitivo están listos para absorber y poner en práctica conocimientos, retienen información con más facilidad e interiorizan lo aprendido a diario, siempre están dispuestos a jugar, a pintar, y desarrollar las actividades pedagógicas.

En el JAPIN se trabajará con ellos a partir de sus habilidades, se centrará en el seguimiento de instrucciones y el acatar normas para el buen desarrollo de las capacidades.

A través de varios rincones y proyectos se desarrollarán las temáticas propuestas siempre en pro del desarrollo de la habilidad de pensamiento lógico y crítico.